Activar la levadura (si es seca): Disolver el azúcar en el agua tibia. Agregar la levadura seca y remover suavemente. Dejar reposar 5-10 minutos hasta que esté espumosa. Si usas levadura fresca, desmenúzarla directamente en la harina en el paso siguiente.

Mezclar ingredientes secos: En un bol grande, mezclar la harina y la sal.

Combinar ingredientes húmedos y secos: Agregar la mezcla de agua y levadura (o la levadura fresca) al bol con la harina y la sal. Incorporar el aceite de oliva.

Amasar: Amasar durante 8-10 minutos, hasta que esté suave y elástica. Si usas amasadora, amasar a velocidad baja 5 minutos y luego media 3 minutos. Si está pegajosa, agregar harina; si está seca, agregar agua, poco a poco.

Primera fermentación: Formar una bola, colocarla en un bol engrasado, cubrir y dejar levar en lugar cálido 1-1.5 horas, o hasta que doble su volumen.

Segunda fermentación (opcional): Desgasificar suavemente, formar una bola, cubrir y dejar levar 30 minutos.

Estirar la masa: Espolvorear harina en una superficie limpia. Estirar la masa con las manos o rodillo al grosor deseado.

Hornear: Colocar la masa en una piedra para pizza o bandeja engrasada. Agregar salsa, queso y toppings. Hornear a 220-250ºC (425-475ºF) durante 12-15 minutos.